EN EL DÍA
En el día en que escape mi vida,
este pequeño pulso que me mueve,
ingresaré a la nada, en una leve
ala de luna contenta y conmovida.
Habrá alforjas de versos en mi barca,
remando sin cesar, humilde, lerdo,
para encontrar la voz de Amado Nervo,
la cítara perenne de Petrarca.
En el halo invisible en que se marca
el fin de la existencia, como un arca
que agota su caudal de lucha y brío,
me envuelva alguna niebla insoslayable
y me pierda por fin, inexplicable,
en brusco final del sueño mío.
PUBLICADO EN POEMAS EN AÑIL Nº 90 DEL 26/09/2006